¿Querés cobrar en dólares y hacerlo bien?

¿Qué significa exportar servicios?

Exportar servicios significa que ofrecés tu trabajo profesional a clientes fuera de Argentina y cobrás desde el exterior. En todos los escenarios que se exporta un servicio porque el cliente está fuera del país. No hay productos físicos cruzando fronteras, pero ingresan divisas al país a cambio de tu trabajo. Esto implica ciertas obligaciones formales (como facturar con comprobante "E") pero también beneficios: hoy esas divisas pueden ser tuyas en dólares, sin convertir obligatoriamente a pesos como antes. En otras palabras, podés competir globalmente y cobrar en moneda fuerte de forma legal.

Argentina estuvo años con trabas (el famoso cepo). Hasta 2025 existía un límite anual de USD 36.000 que podías cobrar sin pesificar, y cualquier excedente tenías que cambiarlo a pesos oficiales perdiendo valor. ¡Eso se terminó! A partir de la Comunicación “A” 8330 del Banco Central (vigente desde septiembre 2025), ya no hay tope anual: podés ingresar todos los dólares que factures, sin restricciones. Además, los bancos locales no pueden cobrarte comisiones por recibir transferencias del exterior en tu cuenta en dólares. Esto reduce costos y mejora tu flujo de fondos. Significa que si un cliente te transfiere USD 1.000, el banco argentino debe acreditarte esos USD 1.000 completos en tu cuenta (solo podrían descontarse costos del banco intermediario del exterior, típicamente USD 20-40, pero muchos bancos locales incluso absorben ese costo para montos modestos). En resumen: podés mantener cada dólar que ganás.

Circuito legal de cobro en USD (del cliente/contractor al banco en USD)

Veamos ahora cómo te paga el cliente y cómo llegan esos dólares a tus manos legalmente. El circuito mejorado es el bancario tradicional vía SWIFT, que aunque suene complejo es bastante directo:

1. Envío desde el exterior: Tu cliente realiza una transferencia internacional (wire transfer) desde su banco hacia tu cuenta en dólares en Argentina. Para eso, vos le tenés que haber dado tus datos bancarios: número de cuenta en USD (CBU o CVU en dólares), el SWIFT/BIC de tu banco argentino, y a veces datos del banco corresponsal en EE.UU. que use tu banco local. Cada banco tiene una guía de “instrucciones de cobro Swift” con estos datos – ¡pedila o bajala de la web de tu banco y compartila con tu cliente junto con la factura!

2. Notificación de pago recibido: Cuando el dinero llega a Argentina, tu banco te avisará. Hoy la mayoría de los bancos te mandan un correo o notificación en su app que dice algo como “Recibiste una orden de pago del exterior por USD X”. Este aviso suele llegar dentro de las 24 a 48 hs desde que el cliente envió el dinero (a veces en el mismo día si tuvo suerte con los horarios).

3. Liquidación de la orden de pago: Ahora tenés que indicarle al banco qué hacer con esos dólares. Antes de la norma de 2025, estabas obligado a “liquidarlos”, o sea, convertirlos a pesos al oficial. Ahora NO. Con la Comunicación A8330 simplemente entrás a tu Home Banking en la sección de comercio exterior u órdenes de pago pendientes, buscás la transferencia recibida y completás la instrucción de liquidación eligiendo “acreditar en cuenta en moneda extranjera” (es decir, en tu caja de ahorro en USD). El sistema del banco te pedirá que adjuntes la Factura E correspondiente (subís el PDF) y que especifiques el motivo de la transferencia. Seleccioná Cobro de exportación de servicios (Com. A 8330) u opción equivalente. Importante: asegurate de marcar que NO querés pesificar. La opción correcta es mantener en dólares. Hecho esto, envías la instrucción.

4. Acreditación en tu cuenta: En uno o dos días hábiles (a veces en minutos, dependiendo del banco) el banco procesa todo y te acredita los dólares en tu caja de ahorro en USD. ¡Listo, cobraste en dólares de forma totalmente legal y sin perder valor! Esos fondos ahora son de libre disponibilidad: podés dejarlos guardados, transferirlos a otra cuenta en dólares, retirarlos en efectivo por ventanilla o – si necesitás gastar en pesos – vender esos dólares al tipo de cambio financiero (MEP) para obtener muchos más pesos que al oficial.

Este circuito cumple con todas las normas: emitiste factura, ingresaste las divisas dentro del plazo de 20 días hábiles desde que te pagaron (requisito del BCRA), y aprovechaste la posibilidad de mantenerlas en moneda dura sin límites. Además, gracias a la normativa, tu banco no te cobrará comisión por acreditarte la transferencia en dólares. Solo puede haber, como mencionamos, un pequeño descuento fijo del intermediario extranjero (usualmente entre USD 15 y USD 50), pero algunos bancos argentinos incluso cubren ese costo para montos pequeños. Por ejemplo, Banco Macro bonifica los gastos de corresponsal hasta USD 10.000. Santander y Galicia no cobran nada localmente y solo trasladan el costo del banco del exterior (USD 20-40). Es cuestión de informarte con tu banco; lo importante es que no perderás un porcentaje de comisión como pasaba antes.

Plazo legal: Tené presente el requisito de tiempo. El BCRA exige que el dinero enviado por exportaciones ingrese a una cuenta local dentro de los 20 días hábiles de que lo cobrás. Esto aplica si, por ejemplo, usás plataformas tipo PayPal, Payoneer o Wise: no podés dejar la plata estacionada meses afuera. Pero si seguís el circuito que describimos (cliente → banco local), estarás cumpliendo.

OTRO IMPUESTO

Ingresos Brutos - Beneficios 0% (ejemplo BS AS)

La Vayamos ahora a los impuestos locales. Además del Monotributo (nacional), los ingresos por tus servicios podrían estar sujetos al Impuesto sobre los Ingresos Brutos (IIBB) a nivel provincial. La buena noticia: en muchas jurisdicciones, incluida la Provincia de Buenos Aires (PBA), las exportaciones de servicios están gravadas a alícuota 0%. Esto se basa en el criterio de que los servicios se consumen en el exterior, entonces la provincia no debería cobrarte por eso. En PBA, el Código Fiscal (art. 186) y la normativa de ARBA establecen formalmente la exención del 100% (alícuota 0) para ingresos de exportaciones de servicios.

¿Significa que me olvido de Ingresos Brutos? No tan rápido. La exención no es automática. ARBA (Agencia de Recaudación de BA) presume que si no te inscribís, igual te debería cobrar hasta comprobar lo contrario. ¿Qué puede pasar si no hacés nada? Que el fisco provincial te empiece a practicar retenciones sobre los montos que entren a tu cuenta bancaria, asumiendo que son ingresos gravados. Por ejemplo, ARBA tiene sistemas como SIRCREB que monitorean créditos bancarios: si detectan que te entraron, digamos, $1.000.000 (equivalente de tus USD) y vos ni figurás como contribuyente exento, pueden retenerte un porcentaje (a veces entre 2% y 5%) automáticamente de tu cuenta. Es un dolor de cabeza, porque después recuperar esa plata demandará trámites largos y engorrosos, con la inflación licuando el monto mientras tanto.

La solución: inscribirte y pedir formalmente el beneficio de alícuota 0. En PBA, si sos exportador exclusivo de servicios, debés registrarte en Ingresos Brutos como contribuyente local (domicilio en PBA) o bajo Convenio Multilateral (si también operás en otras provincias, lo explicamos en la siguiente sección). Luego presentás vía web una “Solicitud de incorporación al padrón con alícuota 0% - Actividad exclusiva de exportación de servicios” en la página de ARBA. Adjuntás documentación que compruebe tu actividad de exportación (ej: las Facturas E emitidas, contratos con clientes del exterior, etc.). ARBA analizará y, si todo está en orden, te coloca en su padrón de sujetos con alícuota 0% para retenciones/percepciones. Esto significa que, a futuro, cuando entren fondos a tu cuenta, no deberían retenerte nada porque ya constás como exento. Igual, mes a mes tenés que presentar la declaración jurada de IIBB en ARBA, consignando esos ingresos como exentos/no gravados. Es trámite administrativo, pero necesario para llevar el control.

Para Provincia de Buenos Aires, cumplir este paso es fundamental. ARBA incluso se está poniendo más proactiva: recientemente anunció que inscribirá de oficio a monotributistas que tengan actividad en PBA y no estén anotados en IIBB, para luego controlarlos. Así que es mejor adelantarse. Conclusión: si vivís o trabajás en PBA, inscribite en IIBB y gestioná la exención 0%. Pagarás $0 por este impuesto, pero evitando retenciones indebidas.

Riesgos de los caminos alternativos (cuevas, cripto, P2P e intermediarios)

Hemos enfatizado las ventajas de “blanquear” tus ingresos y usar el circuito legal. Ahora veamos el otro lado: ¿qué pasa si elijo no hacerlo? Muchos freelancers en años anteriores optaron por caminos alternativos para esquivar el cepo: cambiar dólares en una “cueva” (arbolitos, mercado negro), usar criptomonedas o recibir pagos por plataformas no bancarias y dejarlos afuera. En 2026, esos atajos no solo perdieron gran parte del beneficio económico, sino que conllevan riesgos serios.

• Usar cuevas o “dólar blue”: Supongamos que le decís a tu cliente que te pague a la cuenta de un tercero afuera, o vía Western Union, y ese dinero te lo entregan en mano en Argentina por canales informales. Antes, muchos lo hacían para conseguir un cambio más alto. Pero ahora que podés tener tus dólares libres y venderlos al dólar MEP (casi tan alto como el blue) de forma legal, el beneficio de la cueva es mínimo o nulo. En cambio, el riesgo es alto: si facturaste por ese servicio, legalmente tenés la obligación de ingresar esas divisas al país. Si AFIP/BCRA detectan que emitiste una factura E pero no existe el ingreso correspondiente por el banco, quedás expuesto a multas e incluso a la Ley Penal Cambiaria. De hecho, los bancos llevan un registro (sistema SECOEXPO) de cobros de exportación; si no liquidás una factura en el sistema, es como una alarma en rojo en tus registros. Por otro lado, si directamente no facturaste (evasión total) y cobraste por izquierda, te exponés a sanciones por evasión fiscal cuando sea que te descubran. Ni hablar que ese dinero en efectivo no tiene justificación: no podés depositarlo en el banco sin declarar, ni comprar bienes registrables (autos, inmuebles) sin levantar sospechas. Dato: las cuevas suelen cobrar entre 1% y 3% de comisión por sus servicios, así que tampoco es “gratis”. En suma, operar en negro hoy es jugar con fuego: mucho riesgo legal para ahorrar unos pesos.

• Criptomonedas (cobrar en USDT/Bitcoin) o cuentas en el exterior: ¿Y si el cliente me paga en crypto y yo lo dejo todo en mi wallet? Tecnicamente, si no pasás por el banco local, el BCRA considera que no ingresaste divisas. Estarías violando la norma de 20 días y la obligación de liquidar. “Bueno, ¿y cómo se enteran?” podrías pensar. Primero, si de todas formas hiciste Factura E, el banco va a ver la factura sin cobro ingresado, lo cual es un problema latente. Segundo, aunque no factures, cada vez más las crypto dejan rastro. La Comisión Nacional de Valores en 2025 implementó un registro de proveedores cripto (PSAV) y exchanges locales como Lemon, Buenbit, etc., reportan movimientos al regulador. Si usás plataformas P2P reguladas, también hay trazabilidad. Además, existe intercambio de información fiscal internacional (CRS): cuentas en el exterior a nombre de argentinos pueden reportarse a AFIP automáticamente cada año. Dejar fondos en PayPal, Wise o un exchange extranjero indefinidamente no es invisible. Por último, si necesitás usar esos fondos en la economía real, en algún momento vas a convertirlos: ya sea vendiendo cripto por pesos a alguien (donde podrías toparte con un agente encubierto, o simplemente quedar en registros), o transfiriendo a una cuenta local. Con las nuevas reglas, el incentivo económico de irte por afuera desapareció (porque ya no te obligan a pesificar). Lo que antes se veía como “ganancia” ahora no justifica el riesgo de multas enormes: la Ley Penal Cambiaria prevé sanciones de hasta 10 veces el monto no ingresado para quien no liquide divisas cuando corresponde. Imaginate, por dejar USD 5.000 afuera te podrían reclamar el equivalente a USD 50.000 en multa. No vale la pena.

• La Comisión Nacional de Valores ha implementado plenamente el Registro de Proveedores de Servicios de Activos Virtuales (PSAV).33

  • Impacto Práctico: Todo exchange (Lemon, Buenbit, Ripio, Binance si opera localmente) está obligado a registrarse e informar a la Unidad de Información Financiera (UIF) y a ARCA sobre las tenencias y movimientos de sus usuarios.

  • Resolución General 5804/2025: Establece que los PSAV deben informar mensualmente los saldos en criptomonedas (valuados en pesos) y los movimientos totales cuando superen ciertos umbrales (ej. $50.000.000 mensuales, ajustable).4 Esto significa que ARCA "ve" tus criptomonedas igual que ve tu plazo fijo.

• El acuerdo IGA 1 (FATCA) con Estados Unidos está plenamente operativo en 2026.36 El IRS (fisco estadounidense) envía anualmente a ARCA información sobre cuentas de argentinos en EEUU que hayan generado intereses o dividendos de fuente americana superiores a USD 10.

  • El Riesgo de las Cuentas "Espejo": Muchos freelancers usan cuentas en plataformas como Payoneer o Wise. Estas plataformas no son bancos, pero suelen depositar los fondos en bancos comerciales. Wise, en particular, ha comenzado a cerrar cuentas de residentes argentinos que no pueden justificar residencia en otra jurisdicción, debido a los costos de cumplimiento y riesgo regulatorio.38

  • Intercambio CRS (OCDE): Para cuentas en Europa (España, Alemania, Suiza, UK) o paraísos fiscales cooperantes, el intercambio es automático y abarca saldos y beneficiarios finales. Tener dinero no declarado en Wise (Bélgica) o Revolut (Lituania) es virtualmente transparente para ARCA.

En resumen

El año 2026 presenta un escenario de oportunidad histórica para el freelancer. La combinación de la Comunicación A 8330 (libertad cambiaria) y las escalas actualizadas del Monotributo (Cat. K competitiva) permite, por primera vez en años, pagar impuestos de manera razonable.

Y de esta manera, se consolida el fin del anonimato financiero. La convergencia de regulaciones locales (CNV) e internacionales (FATCA/CRS) cierra el cerco sobre las estrategias de evasión tradicionales. Los caminos “gris/negro” hoy ya NO son atractivos como en el pasado. El escenario regulatorio de 2026 te da la opción blanca con ventajas: cobrás en dólares, sin cepo, sin comisiones locales, con impuestos razonables (Monotributo, que es muy bajo, e IIBB exento). Y a cambio evitás vivir con miedo a inspecciones, bloqueos de cuentas o problemas para justificar tu nivel de vida. La tranquilidad y seguridad jurídica tienen un valor: dormir sabiendo que tus ingresos están en regla y protegidos.

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